El concepto Big Data involucra la obtención y manejo de gran volumen de datos estructurados y no estructurados, provenientes de diversas fuentes como correos electrónicos, interacción con clientes por WhatsApp u otros medios, encuestas on line, navegación en internet, redes sociales, información de proveedores, registros contables y financieros, registros de ventas, etc.
El gran volumen, complejidad y velocidad de crecimiento de la información en la actualidad dificultan su captura, gestión, procesamiento y análisis mediante tecnologías y herramientas convencionales, como bases de datos relacionales y estadísticas convencionales o paquetes de visualización.
Pero no es esta gran cantidad de datos lo más importante, sino lo que las empresas hacen con ellos: estos se deben analizar para convertirlos en información útil para la toma de decisiones: conocer el comportamiento del cliente, detectar oportunidades y amenazas en el entorno, fortalezas y debilidades en sus operaciones. En otras palabras, la recopilación y análisis adecuado del Big Data nos ayudará a convertirnos en expertos en nuestros clientes, en el mercado y en nuestra organización.